El testimonio de legitimación de firma es el testimonio que acredita el hecho de que, en determinada fecha, una firma ha sido puesta en presencia del notario y por quien evidentemente es quien dice ser.
La legitimación de firma podrá o no comprender el juramento o afirmación.
El notario hará constar tanto en el testimonio, como en el Registro, su conocimiento personal del firmante o en su defecto la utilización de los medios supletorios que provee el la sec. 2035 de este título. Cuando el firmante no sepa o no pueda leer o firmar, regirá lo dispuesto en las secs. 2039 y 2043 de este título y la Regla 32 de este apéndice.