§ 456k. Registro de armas; pérdida y entrega de arma de fuego; muerte del poseedor de licencia

PR Laws tit. 25, § 456k (2018) (N/A)
Copy with citation
Copy as parenthetical citation

(a) El registro de armas creado en el cuartel general de la Policía se ajustará en su organización y funcionamiento a las disposiciones de este capítulo y será llevado en forma computadorizada, sistemática y ordenada de manera que se facilite la búsqueda de información. Este registro deberá estar debidamente custodiado.

(b) Toda arma de fuego legalmente poseída después de entrar en vigor esta ley deberá ser inscrita en el registro de armas, en caso de que no estuviere previamente inscrita. El Superintendente entregará al declarante una constancia de dicha inscripción.

(c) Toda persona que posea o tenga bajo su dominio un arma o municiones debidamente autorizadas por ley y las pierda, se le desaparezcan, se las roben o sean sustraídas mediante apropiación ilegal, deberá notificarlo mediante la presentación de una querella al distrito o precinto policíaco donde éste resida o en el cuartel de la Policía más cercano, inmediatamente advenga en conocimiento de su pérdida, desaparición, robo o apropiación. Si no cumple con tal obligación, será culpable de delito menos grave y convicta que fuere, será sancionada con pena de multa hasta un máximo de cinco mil dólares ($5,000) por cada arma o cada quinientas (500) o fracción de municiones dejadas de informar.

(d) Cuando falleciere una persona debidamente autorizada para la tenencia de armas, será deber de todo administrador, albacea o fideicomisario, o de cualquiera de ellos que actúe en Puerto Rico, y de cualquier subadministrador, agente o persona autorizada legalmente para administrar los bienes, notificar su fallecimiento al Superintendente dentro de los treinta (30) días siguientes a la fecha del fallecimiento. La notificación expresará el nombre, residencia y circunstancias personales del fallecido. No notificar este hecho constituirá delito menos grave que será sancionado con pena de multa no mayor de quinientos (500) dólares. El Superintendente dispondrá lo necesario para el recibo, almacenamiento, custodia, que podrá ser por una persona con licencia de armas o una armería designada por el administrador, albacea o fideicomisario y/o disposición de dichas armas, mientras se distribuye la herencia. Si las armas fueren adjudicadas a un heredero que sea elegible para obtener una licencia de armas, y se le expidiere tal licencia, dicha arma o armas le será entregada; Disponiéndose, que si dicho heredero ya fuera dueño del número máximo de armas permitido en este capítulo, el Superintendente concederá una autorización para la tenencia de las armas adquiridas por disposición de herencia, según el formulario que establezca éste mediante reglamento. De serle denegada tal licencia, o de disponerse la venta de dicha arma en pública subasta, la misma podrá ser adquirida únicamente por una persona con licencia de armas vigente, mediante subasta o por un armero debidamente autorizado por este capítulo y, de no ser así adquirida, dicha arma será entregada para su decomiso al Superintendente, tal como se dispone en este capítulo. Disponiéndose, además, que el Superintendente no entregará ninguna arma que, previo al fallecimiento de su dueño, no hubiese sido debidamente inscrita a tenor con el inciso (b) de esta sección.

(e) Cualquier adquisición, compra, venta, donación, cesión o cualquier forma de traspaso de titularidad de un arma de fuego y municiones deberá ser realizada ante una persona con licencia de armero para su correspondiente inscripción en el registro electrónico y en sus libros, en conformidad a lo dispuesto en la sec. 456i de este título. También podrán realizarse los mencionados medios de traspaso de titularidad entre concesionarios de licencia de armas mediante los formularios de traspaso de armas que provea el Superintendente, dentro de los cinco (5) días siguientes al otorgamiento, para la debida anotación y corrección en el registro electrónico.