Toda persona que ejerza funciones como técnico de emergencias médicas paramédico o básico sin poseer la licencia correspondiente otorgada por la Junta, o que habiendo sido revocada o suspendida su licencia continúe practicando la profesión, será culpable de delito menos grave y convicto que fuere [será] castigad[a] a no más de seis (6) meses de cárcel, o una multa no mayor de dos mil quinientos dólares ($2,500), o ambas a discreción del tribunal.